El problema de los ‘puntos de carga fantasma’ en España: el 25% no funciona
Los usuarios de coches eléctricos en España han de hacer frente a la grave problemática que plantea la instalación y distribución actual de los puntos de carga. La información relativa a su ubicación, pese a ser algo tan básico como la de las gasolineras, no se encuentra ni de lejos tan disponible como esta última. Esto se ha tornado en un problema bastante serio para los conductores de vehículos eléctricos, quienes encontrarán graves problemas a la hora de encontrar un punto para recargar la batería.
Por si esto fuera poco, si conduces uno de estos vehículos, deberás hacer frente a otro problema también relacionado con los puntos de carga en España: muchos de ellos ni siquiera funcionan.
Puntos de carga fantasma para coches eléctricos: qué son y por qué existen
Los puntos de carga son los lugares a los que acuden los conductores de vehículos eléctricos o híbridos con la finalidad de recargar la batería de su vehículo y conseguir, de esta manera, la energía que necesitarán para mantener su funcionamiento. Para entendernos, podríamos llamarlos «gasolineras para coches eléctricos”.
De esta forma, lo que se conoce como puntos de carga fantasma son todos aquellos puntos de carga que, pese a que cuentan con las instalaciones pertinentes, no son capaces de proporcionar la carga eléctrica que necesitan los coches eléctricos para funcionar.
Lo cierto es que la situación de los puntos de carga para coches eléctricos en España es muy precaria debido, principalmente, a su escasez e irregular distribución. A estos problemas hemos de sumar el que representa la propia existencia de los puntos de carga fantasma, al traer muchos problemas a la hora de conocer las cifras exactas de puntos de carga disponibles y generar confusión y frustración entre los usuarios de automóviles eléctricos.
Debido a esto, los que conducen un coche eléctrico en España, o quieren conducirlos, deben conocer al dedillo los diferentes puntos de carga funcionales a los que pueden recurrir en su entorno cercano, comprobando primero que estos no son puntos fantasma para evitar sorpresas desagradables.
La pésima situación de los puntos de carga en España
Tal y como ha asegurado la asociación de fabricantes de vehículos ANFAC, en España existen 26.718 puntos de carga diferentes, de los cuales una cuarta parte de ellos no funcionan. Estos 6.475 puntos de carga son conocidos popularmente como “enchufes fantasma”, y solo estos causan graves daños a un tipo de movilidad que todavía experimenta un gran retraso en nuestro país.
De hecho, a estas alturas de los acontecimientos, en España se debería contar con el doble de coches eléctricos en circulación, así como el doble de enchufes de carga con los que cumplir los objetivos medioambientales comprometidos ya con Europa.
Los fabricantes sugieren que habría que multiplicar el número de puntos de carga de alta potencia en España por cinco, dado que las cifras con las que contamos hoy en día son insuficientes para mantener las necesidades de los conductores de vehículos eléctricos. Antes de finalizar el año 2023, se espera contar con más de 45.000 puntos de carga públicos y, en 2035, se deberían superar los 600.000 enchufes. Estas metas son bastante difíciles de conseguir dadas las circunstancias actuales, teniendo en cuenta las bajísimas cifras que tenemos.
El problema de los “puntos de carga fantasma”
La problemática que plantea la existencia de los “puntos de carga fantasma” en España solamente complica más esta situación. Los datos de ANFAC revelan que el 25% de los enchufes instalados a día de hoy no funcionan correctamente, o bien sí funcionan pero no cuentan con los permisos necesarios de conexión.
Por si esto no fuera suficiente, cabe tener en cuenta también que la gran mayoría de los puntos instalados en España son de baja potencia, lo que los hace insuficientes para el parque automovilístico eléctrico actual, así como para cumplir con los objetivos y compromisos planteados en España por la normativa europea “Fit for 55”, diseñada para evitar el 55% de las emisiones contaminantes actuales en 2030.
La irregular distribución de los puntos de carga
Los puntos de carga pública, además de ser escasos y, en algunos casos, no funcionar, se encuentran también mal distribuidos por el país, concentrándose principalmente en las urbes y zonas más pobladas:
- Cataluña es la comunidad autónoma que dispone de más enchufes para vehículos eléctricos (4.955)
- Seguida de Madrid (2.573)
- Valencia (2.308)
- Y Andalucía (2.274)
En el País Vasco, por ejemplo, no se llega ni a los 800 puntos de recarga.
La ANFAC señala que se deben proporcionar ayudas para incentivar la transición al uso de este tipo de vehículos que sean eficientes y de las que se puedan disponer en el momento de la compra. Además, se deberán simplificar también las diferentes trabas administrativas y crear un centro estatal de desarrollo de infraestructuras de recarga que pueda hacerse cargo de la producción de los enchufes restantes.
Otra queja que plantean los fabricantes de vehículos se trata de la imposición de objetivos vinculantes con penalización incluida, mientras que los Estados únicamente deben lidiar con metas que no necesariamente deben cumplir. Así, el único colectivo penalizado por el incumplimiento de estas medidas es el sector de la automoción.
El impacto en el transporte pesado
Por supuesto, todos estos problemas que sufre el sector de los coches eléctricos para particulares en nuestro país también afectan al transporte de mercancías por carretera, sector que todavía no puede experimentar un solo ápice de progreso por culpa de la escasez de puntos de carga funcionales en España que sean capaces de suministrar la potencia suficiente como para recargar la batería de vehículos eléctricos de mayores dimensiones.
Es por ello que este sector requiere de importantes garantías para llevar a cabo inversiones, así como para escalar flotas de vehículos sustentados por energía eléctrica. Sin un importante apoyo gubernamental, estas flotas no lograrán desplegarse nunca limitando considerablemente este proceso de descarbonización que Europa nos ha impuesto a través de diferentes normativas.
Entradas relacionadas
¿Quieres saber más detalles?
Completa el formulario y te llamamos
O llámanos tú al
91 198 75 45
Nuestro horario es de L-V de 9h a 18h
Deja una respuesta