¿Cuál es la situación actual de los coches autónomos?

En algún momento de la historia del mundo automotriz, se pensó que los coches autónomos eran solo una utopía. Sin embargo, cada día están más cerca de formar parte de nuestra realidad. Si bien estos coches aún tienen un largo camino que recorrer, encontrándose en la fase dos de automatización en España, lo cierto es su rápida progresión está superando todas las expectativas, haciéndonos pensar sobre su futuro de cara al corto y medio plazo.

El coche autónomo está cada vez más cerca de nosotros. De hecho, en el mercado existen varios modelos que son capaces de realizar ciertas tareas por su cuenta, como aparcar o cambiar de carril. Asimismo, sabemos que en algunos lugares del mundo ya es posible ver vehículos sin conductor, pero ¿qué tan eficiente será este proceso? ¿lo podremos ver en España? Desde el renting de coches te contamos todos los avances sobre esta tecnología, así como su situación actual.

¿Qué es un coche autónomo y cuál es su futuro?

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Entendemos por vehículo autónomo a aquel que puede imitar la conducción humana, junto con sus capacidades de reflejo y reacción. Sin embargo, el objetivo es que estos coches puedan realizar esta tarea aún con más eficiencia, para así prevenir y evitar accidentes que son producto de factores humanos como fatiga o despistes.

Mediante tecnologías complejas como los sensores LiDAR, los sistemas de posicionamiento global y una visión computarizada, es posible que el coche autónomo analice el ambiente que le rodea y conduzca en consecuencia. Lo ideal es que el usuario solo tenga que elegir el destino del viaje y que el vehículo realice todo lo demás. Sin embargo, actualmente es posible encontrar 5 niveles de autonomía, siendo el nivel 1 y 2 los más sencillos de implementar y de hallar.

¿Cuáles son los 5 niveles de conducción autónoma?

Las funciones que realiza un coche autónomo se dividen en cinco niveles, cada uno más avanzado y complicado que el anterior. El objetivo final es alcanzar el quinto nivel, que permitiría al vehículo realizar todas las tareas necesarias para asegurar una experiencia de viaje óptima.

Nivel 1: asistencias al conductor

El vehículo puede “ayudar” al conductor en una o dos funciones de conducción, como el control de crucero adaptativo o la asistencia para mantener el carril. En este caso, el conductor debe mantenerse atento y listo para tomar el control. La mayoría de coches nuevos incorporan estas ayudas a día de hoy.

Nivel 2: automatización parcial

El coche puede controlar tanto la dirección como la aceleración y el frenado en ciertas condiciones, como en autopistas. Sin embargo, el conductor debe estar preparado para tomar el control en cualquier momento. Un ejemplo lo podemos encontrar en los sistemas de piloto automático en algunos vehículos de lujo.

Nivel 3: automatización condicional

En este nivel, el vehículo puede manejar la mayoría de las tareas de conducción en determinadas condiciones, como en tráfico congestionado o en autopistas. El conductor puede realizar otras tareas, pero debe estar listo para tomar el control si el sistema lo solicita.

Nivel 4: alta automatización

En este caso, el coche puede manejar todas las tareas de conducción en un entorno geográficamente delimitado y en condiciones específicas. No se requiere intervención humana en la mayoría de las situaciones, pero un conductor puede estar presente para tomar el control en caso de emergencia.

Nivel 5: automatización completa

El vehículo puede conducirse a sí mismo en todas las condiciones y en cualquier lugar, sin necesidad de intervención humana. No hay volante ni pedales, ya que el coche toma todas las decisiones de conducción. Este es el objetivo final de los coches autónomos, en los que el conductor no sería más que un mero espectador.

¿En qué nivel nos encontramos ahora respecto a los coches autónomos?

Hoy en día, la mayoría de los vehículos en la carretera ofrecen asistencias al conductor, como el control de crucero adaptativo o la asistencia para mantener el carril, pero no pueden conducirse por sí mismos. Muchas empresas tecnológicas y fabricantes de automóviles están llevando a cabo pruebas exhaustivas de vehículos autónomos en entornos controlados, como ciudades planificadas y autopistas.

Cuáles son los desafíos a los que se enfrentan los vehículos autónomos

Sin embargo, la implementación a gran escala de estos coches requiere de un marco regulatorio sólido que aborde cuestiones como la responsabilidad en caso de accidentes y la seguridad de los peatones, así como abordar dilemas morales y éticos relacionados con la toma de decisión de estos vehículos al enfrentarse a dos colisiones o posibles accidentes simultáneamente.

Uno de los principales desafíos técnicos es la capacidad de los vehículos autónomos para percibir su entorno en tiempo real y tomar decisiones rápidas basadas en esa información. Esto incluye detectar objetos estáticos y en movimiento, así como condiciones climáticas adversas. Además, se necesitan mapas altamente precisos y actualizados para que los vehículos puedan navegar de manera segura.

A medida que la tecnología avanza y las regulaciones se perfeccionan, podemos esperar ver una mayor adopción de vehículos autónomos en los próximos años. Sin embargo, es probable que veamos un despliegue gradual, comenzando en entornos controlados y expandiéndose gradualmente a áreas más complejas. La coexistencia de vehículos autónomos y convencionales durante un período de transición será un desafío importante.

¿Cómo es la situación de los coches autónomos en España?

La situación de los coches autónomos en España se encuentra en un momento de transición. Si bien la tecnología para vehículos completamente autónomos ya existe, la legislación actual limita su uso en las carreteras españolas. En la actualidad, solo se permiten vehículos con un nivel de autonomía SAE 2, lo que significa que el conductor debe estar siempre atento y listo para tomar el control.

Sin embargo, las autoridades españolas son conscientes de la importancia de esta tecnología y están trabajando en la actualización de la normativa para permitir la circulación de vehículos con niveles de autonomía más altos. Por ello, se espera que en el transcurso de este año se aprueben nuevos reglamentos que faciliten la homologación y uso de estos coches.

A pesar de las restricciones legales actuales, la industria automotriz y tecnológica está invirtiendo fuertemente en el desarrollo de vehículos autónomos, con pruebas piloto en múltiples ciudades españolas de gran relevancia. Es probable que en los próximos años veamos una mayor flexibilidad en la normativa, lo que permitirá la coexistencia de vehículos autónomos y convencionales en nuestras carreteras.

En definitiva, si bien los coches totalmente autónomos están lejos de ser una realidad, por lo menos en España, la rápida evolución de estos vehículos está superando cualquier previsión, por lo que puede que estén en nuestras carreteras antes de lo esperado. Cuando estos automóviles sean una realidad, el renting de coches será la mejor modalidad para probarlos, ya que permite acceder a los coches más novedosos del mercado sin pagar entrada ni ningún tipo de sobrecoste.

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¿Qué es un coche autónomo y cuál es su futuro?