Por qué no deberías usar los neumáticos de invierno durante todo el año
Los neumáticos desempeñan un papel fundamental en la seguridad del vehículo. Estos son los responsables del agarres al pavimento. Por eso, si pierden adherencia, el coche puede derrapar o patinar, pudiendo incluso llegar a causar un accidente. Las condiciones en la carretera cambian y, precisamente por este motivo, existen neumáticos para todas las épocas del año.
¿Se puede conducir con neumáticos de invierno durante todo el año? Esta es una pregunta que seguramente te has planteado más de una vez. Al final, cambiarlos dependiendo de la época, requiere de tiempo y esfuerzo. Pero la respuesta es clara: no es recomendable usar siempre los mismos neumáticos. Desde el renting de coche te contamos los motivos por los que no deberías usar siempre los neumáticos de invierno.
¿Qué son los neumáticos de invierno?
Lo primero que debes saber es que un neumático con certificación de invierno está diseñado para mantener una mayor tracción en carreteras heladas o nevadas. Suelen tener las siguientes características:
- Su compuesto está diseñado especialmente para conducir bajo temperaturas de frío extremo. De esta manera, aunque las temperaturas desciendan, las formas no se endurecerán y seguirán garantizando una máxima adherencia a la carretera.
- La estructura de los neumáticos de invierno es diferente al resto ya que es más elástica con el objetivo de potenciar el agarre.
- El dibujo de esta clase de neumáticos tiene dibujos con canales más profundos y anchos. De esta manera pueden evacuar mayor cantidad de agua y evitar así el aquaplaning.
- Los neumáticos de invierno pueden tener o no tener clavos.
Por qué no es recomendable utilizar siempre neumáticos de invierno
Los neumáticos de invierno están especialmente diseñados para conducir con temperaturas de frío extremo y precipitaciones y no en verano. Esto se debe a los siguientes motivos:
- La distancia de frenado se incrementa: cuando sube la temperatura, la distancia puede ser del doble en comparación a la de un neumático de verano.
- Sufren un mayor desgaste: por eso no tiene sentido utilizarlos si no es estrictamente necesario.
- Pierden eficacia: cuando las temperaturas están por encima de 30º el caucho del neumático empieza a crear pequeñas bolas que afectan al correcto movimiento de la rueda.
- Limitan la velocidad máxima: al ofrecer una mayor resistencia también provoca un mayor gasto de combustible.
Los neumáticos de invierno tienen un precio mayor que el resto de neumáticos. Es por eso y por el desgaste que sufren que usarlos durante todo el año es más caro que montarlos cuando llega el frío. Al final, cuanto más los utilices, antes tendrás que sustituirlos por unos nuevos. Además, es importante saber que utilizándolos durante el verano estarías perdiendo eficacia ya que, con el asfalto caliente, el caucho se degrada antes.
¿Cuándo debería usar neumáticos de invierno?
Lo más recomendable es utilizar los neumáticos con certificación de invierno cuando las temperaturas descienden por debajo de los 7ºC. Ten en cuenta que estos neumáticos, están diseñados para que puedas conducir durante temperaturas frías y precipitaciones.
La época ideal para poner tus neumáticos de invierno es en octubre, justo en el momento en que las temperaturas empiezan a descender notablemente. Por otra parte, se recomienda tener este tipo de neumáticos hasta más o menos marzo, que es cuando empieza a haber un aumento de las temperaturas.
Neumáticos de invierno y de verano
En algunos países en los que el uso de neumáticos de invierno es aconsejado e, incluso, obligatorio, todos los conductores cuentan con dos pares que van cambiando dependiendo de la época del año: unos para el frío y otros para el buen tiempo.
Por eso, al igual que tú no llevas botas de invierno en pleno agosto, tu coche no debería llevar neumáticos de invierno durante el verano.
¿Cómo simplificar el montaje y desmontaje de neumáticos?
Conducir todo el año con neumáticos de invierno es un error. Por eso, lo más recomendable es tener otros más específicos para el buen tiempo para así poder ir variando según la época del año en la que te encuentres.
Cambiar los neumáticos cada temporada puede resultar pesado. Pero hay una manera de simplificar esta tarea y que, además, hará que ahorres tanto tiempo como dinero: compra otras ruedas con el mismo diámetro y patrón de pernos que las que ya tienes.
Gracias a esta técnica podrás montar tus neumáticos de invierno y guardarlos hasta que llegue de nuevo octubre. De esta manera podrás mantener las llantas y solamente tendrás que cambiar las ruedas. Esta alternativa es rápida a la vez que económica y te permitirá montar y desmontar los neumáticos de invierno cada temporada y sin complicaciones.
En conclusión
Los neumáticos de invierno han sido fabricados con un compuesto especial que hace que conducir a temperaturas bajas y extremas sea mucho más seguro. Pero eso sí, no te olvides que estos no son válidos durante todo el año, sino que deberás cambiarlos cuando llegue la primavera
.Y si lo que quieres es ponerte al volante del vehículo que quieras, sin largas esperas ni pagos iniciales, echa un vistazo al catálogo de coches renting para particulares. El renting es la mejor forma de cambiar de vehículo cada pocos años y estrenar así un coche nuevo, seminuevo o de segunda mano, sin entrada y con todos los gastos incluidos. ¡No te lo pierdas!
Entradas relacionadas
¿Quieres saber más detalles?
Completa el formulario y te llamamos
O llámanos tú al
91 198 75 45
Nuestro horario es de L-V de 9h a 18h
Deja una respuesta