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i-Size
El i-Size (o normativa i-Tamaño en castellano) es una normativa homologada para sillas infantiles que tiene el objetivo de simplificar el proceso de elección y uso de estas sillas. Pretende conseguirlo estableciendo unas medidas universales para los asientos infantiles en función de la estatura del niño.
De acuerdo al i-Size, las sillas infantiles están clasificadas por la estatura, a diferencia de la ISOFIX, la anterior normativa, que se regía por el peso.
El sentido de esta homologación es que en caso de accidente haya menos porcentaje de error que con la anterior modalidad. De acuerdo con esta normativa, en caso de impactos laterales se minimizan las lesiones de cuello, cabeza y abdomen en niños de 0 a 10 años.
De esta forma, las sillas infantiles deberán ser reemplazadas en el momento en que la cabeza del niño toque la parte superior de la silla.
Cada silla debe estar correctamente identificada con el número de serie, lugar de fabricación, medidas del niño, y otros datos. Entre las medidas debe especificarse la talla y peso de los niños que irán sentados en la silla.
Estas sillas están diseñadas para instalarse en las plazas de los coches catalogadas con sistemas ISOFIX, los cuales permiten un montaje más simple y evita que puedan quedar mal colocadas.
Clasificación de las sillas i-Size
Es recomendable que los niños tengan un SRI (Sistema de Retención Infantil) con respaldo, algo no previsto en la anterior normativa. Existen tres tipos de sillas con la normativa i-Size, cada una con una medida para las diferentes edades:
- 40-75 cm: estas sillas están diseñadas para los niños recién nacidos y hasta aproximadamente los 12 meses. Su instalación debe ser a contramarcha y utilizando un tercer punto de detención.
- 40-105 cm: estas sillas funcionan para los niños hasta los 4 años aproximadamente, y en peso, hasta los 18 kilos. Para su instalación cuentan con anclaje ISOFIX y una pata de apoyo. Deben ir a contramarcha.
- 100-150 cm: en estas sillas el niño va sujetado con el cinturón de seguridad, y el peso que soporta es desde los 15 hasta los 36 kilos, siendo aproximadamente desde los 4 hasta los 12 años.
Mejoras de esta nueva normativa
- Está catalogada en función de la talla o altura del niño, permitiendo utilizar una misma silla durante más tiempo.
- Están hechas para colocarse a contramarcha hasta los 15 meses, siendo así más seguras y con menor porcentaje de riesgos.
- Soportan impactos frontales, traseros y además laterales.
- Tienen menos complicaciones a la hora de instalarse gracias al sistema ISOFIX.
- Vienen identificadas con la altura adecuada al niño, haciendo más sencillo su compra.
- Le dan prioridad a la instalación a contramarcha.
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